Solo para coleccionistas muy exigentes
Hola amigos como andan? hoy traigo papelería de colección, una pieza muy difícil de conseguir que me llegó de la mano del amigo Pablo Deisel desde Bahía Blanca. Se trata de una hoja que se distribuía en los kioscos donde se vendían las figuritas y explicaba algunas cuestiones sobre los premios por completar el álbum, las figuritas que tenían premio y la garantía de llenado.
Como se puede leer en la imagen anterior el premio mayor era por una pelota de cuero N°5, y la podían conseguir, nada más y nada menos que 1000 chicos. Esto es un numero grande de posibles ganadores, lo que no aclaran es que si para que te den el premio tenías que entregar el álbum o solo presentarlo. Porque me pregunto yo, ¿Quién iba a querer canjearlo después de tanto sacrificio para llenarlo? y encima el álbum y sus figuritas son hermosas como para dejarlo ir por una pelota de futbol.
Del chico 1001 al 5000 el premio era un reloj digital, otro lindo premio para nada despreciable.
Por otro lado estaban las figuritas que tenían premios extras, éstas con una letra en el reverso las podías canjear por su correspondiente premio. Nunca vi una de ellas pero en el afiche promocional dicen que son plastificadas. Como pueden ver había un premio diferente por cada letra del abecedario y de amplia variedad.
Acá tenemos al trepamuros con una pelota al pie y mirando a quien le puede tirar un centro. |
Acá en está parte del afiche hay una cuestión curiosa ya que no es un concurso libre sobre el Hombre Araña sino una promo de álbum lleno, pero de todas maneras Ultrafigus muestra su grandeza y haciendo una de las secciones de los premios amplia y para todos los pibes. Podías llevar un dibujo del lanza redes y sacar un sobre de figuritas gratis, y si ahí te tocaba una figurita con premio te lo llevabas.
Es decir que con un simple dibujo te ganabas un sobre de figus gratis, y si adentro había una letra en una de las figuritas te llevabas ese premio. Muy diferente a otras empresas o editoriales de figuritas.
Y por último, en el final del afiche, te aclaraban que no había figuritas difíciles en esta colección (cosa que en otros tiempos y colecciones si era habitual) y que si te faltaban menos de 9 figuritas las podías comprar y llenar el álbum. Otra de las facilidades que te daban para poder terminar de llenarlo.
Para despedirme quiero comentarles que a veces este afiche venía abrochado al álbum de figuritas, y otras veces los pegaba el kiosquero en un vidrio para que los chicos se enteraran de la promo. Hoy en día, pensándolo a la distancia, es un lindo objeto de colección ya que era un papel destinado a perderse o tirarlo a la basura, muy rara vez se lo guardaba.
Cabe señalar que Ultrafigus le ponía especial empeño a este tipo de folletería, tanto la exclusiva para vendedores y kiosqueros como la que se incluía en el álbum. Con diseños exclusivos y diferentes a los que se incluían en el álbum y las figuritas, todos ellos ideados por Pascual Lococo, dibujante y diseñador de la mayoría de los productos de la editorial.
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