miércoles, 11 de mayo de 2016

Semiología de la viñeta

Un villano sin igual

Recuerdo la tapa de esta revista de cuando tenía ocho años. Me la compraron y quede sorprendido por el villano al que enfrentaba el Hombre Araña. Un personaje de traje simple pero algo siniestro en sus poderes, era intocable. 

Le podían pegar, tirar telas de araña, envestir, intentar sujetar y todo era imposible, él agrandaba sus manchas negras o las esparcía por el espacio y todo intento se perdía en esos agujeros de gusano. Con ustedes La Mancha.



La historia de este personaje viene de la mano de Al Milgrom, guionista de esta historia. La trama incluye la fuga del traje negro, el amorío con la Gata Negra y una subtrama que incluye a Kingpin. 

En dos números aparecía este personaje al que Milgrom le dedicó las portadas. Un tipo con un traje blanco con manchas circulares negras de diferente diámetro (“spots” en inglés, de ahí la versión original de su nombre The Spot, que podemos traducir literalmente como el punto).


En la historieta muestran como Johnathon Ohnn es un científico a las órdenes de Kingpin que tiene como objetivo un experimento que consiste en copiar los poderes de Capa. Algo en el experimento sale mal y Johnathon consigue crear un portal, por el que cae y se convierte en La Mancha.

De ahí surge el enfrentamiento con el Hombre Araña y la Gata Negra pero vale resaltar que el personaje no es malo como otros villanos del trepamuros sino que actúa con resentimiento y en busca de su propio objetivo personal en nombre de la ciencia.


La cuestión es que en aquellos años de mi infancia cuando lo vi por primera vez y vi como se enfrentaba a mi héroe favorito y lo dejaba en ridículo me pareció genial y hasta siniestro. ¿Cómo era posible que no lo pudieran tocar, que cada golpe o piña se perdía entre sus círculos negros? Era alguien imbatible. 

Para colmo de males en el final de la historieta decía continuará. No había conclusión y encima no estaba seguro de que mis viejos me compraran la próxima revista. Así que en mi imaginario este personaje -que con el tiempo supe que era de segundo o tercer nivel- había adquirido el nivel de insuperable. 

Y desde aquellos días que no lo había vuelto a ver hasta hace unos años que conseguí este ejemplar y la continuación y supe como termina la historia. Es por ello que decidí hacerle un breve homenaje a este personaje, a su traje y a los poderes que desplegaba en las viñetas. 

Hasta la próxima.



2 comentarios:

  1. Tuve esta revista !!!! Me la compraron de vacaciones en la costa. Ya ni estaba en mi cabeza ese recuerdo hasta que vi este posteo..Abrazo

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  2. Claudio, abrazo. Que bueno que te haya traído este recuerdo.

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