La fuerza de lo sencillo
En la reseña anterior mostrábamos como este villano de poca monta se hacía un lugar para luchar contra los principales héroes de Marvel y sin demasiado despliegue de poderes y recursos en su traje se ganaba un lugar entre los villanos de segunda línea de este universo.
Es más, supo aguantar el paso del tiempo sin grandes modificaciones y desde aquella aventura en la que enfrentaba a HULK en "The Increible Hulk" volumen 1, Nº 212 en junio de 1977 se hace un lugar en la colección de estatuillas que Eaglemoss le dedico a Marvel.
Más precisamente la Nº 191, casi terminando la colección en el año 2013. Aquí les dejo los resultados.
La estatuilla tiene una impronta simple y potente. El valor y la elegancia se la van a notar una vez que la tengan en sus manos.
Partimos del diseño del personaje que esta basado o inspirado en una imagen de los primeros tiempos del villano donde lo vemos en postura de desafío. Parado con los brazos a los costados -de uno de ellos se extiende el tentáculo de adamantium con el cual absorbe y comprime a sus oponentes- mirando seriamente al frente, como retando al contrincante.
En su rostro vemos tranquilidad y seriedad, no como esos villanos que están desquiciados o alterados desde el principio, ni como aquellos que ríen o muestran su ira dejando al descubierto su desequilibrio emocional.
Es por este motivo que en este apartado contamos con una premisa simple y contundente que aporta armonía a la figura. Comparen ustedes entre la imagen de la historieta y la estatuilla.
En el segundo apartado, en nivel de detalle vamos a encontrar que salvo las botas y la franja que recorre desde el pecho al abdomen, y en la parte posterior, desde la cintura a la cabeza, donde hay líneas horizontales bien detalladas el personaje no tiene grandes relieves en su traje. Lo que completan el conjunto de la figura son los rasgos del cuerpo bien definidos y el tentáculo que sale de su mano y descansa en la base.
Esta composición de detalles, mas los rasgos del rostro y la musculatura, no son exagerados y refuerzan este nivel de simpleza que mencioné antes.
Por último mencionaremos el nivel de pintura que se suma al concepto general. En solo 6 colores resolvemos la ecuación. Dos colores dominan la escena y son el azul que ocupa el 60 % de la figura y en menor proporción el amarillo (30%), luego vemos plateado en el tentáculo (3%), rosado en el rostro (2%), negro en los detalles de la líneas (3%) y por ultimo blanco en los ojos.
En definitiva, una figura que hasta que no la ves personalmente puede pasar desapercibida o es de las que nunca comprarías pero que con una premisa simple cumple su cometido y mantiene el nivel de la colección.
Los muñecos que mencionas los conozco por haber tenido de niño a HULK pero por el momento no tengo ninguno como para analizarlo. Tendría que buscar material de archivo. Hace unos años me encontré tirado y bastante dañado a Leviatán, el villano de los X-Men y se lo regale a mi sobrino. En ML vi que venden a la Mujer Araña pero bastante cara para el producto que es.
ResponderEliminarDe los otros muñecos que mencionas, son los MEGO y se editaron varios tanto de DC como de Marvel. Un producto de calidad, similar a los Temerarios de los 70 y 80 pero basados en los superhéroes, hoy en día los venden a precios elevados.
Si tengo la oportunidad de ver el material seguro que preparo una reseña.
Muchas gracias por participar del blog.